Ciudad de México. Los llamados impuestos saludables propuestos en la iniciativa de Ley de Ingresos 2026 dejarán alrededor de 41 mil millones de pesos a las arcas públicas, recursos que serán destinados en su totalidad al presupuesto de salud, afirmaron funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En conferencia de prensa, el secretario Édgar Amador Zamora y la subsecretaria de Egresos, Bertha Gómez Castro, explicaron que este monto permitirá que el gasto en sanidad pase de 881 mil 460 millones en 2025 a 965 mil 663 millones en 2026. La mitad de ese incremento provendría de los ajustes al IEPS sobre bebidas azucaradas, con edulcorantes no calóricos y tabaco.
La iniciativa contempla elevar la cuota del IEPS en bebidas saborizadas de 1.64 a 3.08 pesos por litro e incrementar entre 160 y 200 por ciento el gravamen a cigarros, así como extender el impuesto a otros productos con nicotina. También se plantea un impuesto de 8 por ciento ad valorem a videojuegos violentos, que dejaría 183 millones de pesos adicionales.
El subsecretario de Ingresos, Carlos Lerma Cotera, reconoció que gravámenes similares no redujeron de manera clara el consumo, como ocurrió en 2014, pero destacó que el costo de atender enfermedades relacionadas con estos productos asciende a 116 mil millones de pesos anuales.
Organizaciones empresariales criticaron la propuesta. La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) señaló que se trata de un golpe al bolsillo de las familias y un incentivo al mercado ilegal. “Queremos un parlamento abierto para que se escuchen todas las voces”, demandó su dirigente, Cuauhtémoc Rivera.
El Consejo para el Desarrollo del Comercio en Pequeño advirtió que las ventas de los minoristas se verán afectadas y cuestionó que los recursos recaudados en años anteriores no se canalizaron directamente al sector salud.
Por su parte, la Coparmex sostuvo que las medidas generan incertidumbre fiscal, pueden desincentivar la inversión y carecen de evidencia sobre su efectividad para reducir el consumo de productos nocivos.
Hacienda también propuso eliminar la deducibilidad de las aportaciones de los bancos al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), lo que permitirá captar 10 mil millones de pesos anuales. Además, se analiza un nuevo esquema para incentivar la repatriación de capitales, con una tasa de 15 por ciento, más alta que la aplicada en 2017.
“Todas las medidas cumplen con los parámetros constitucionales”, aseguró el jefe del SAT, Antonio Martínez Dagnino.