El presidente Andrés Manuel López Obrador respaldó la petición de los 32 gobernadores estatales ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para ratificar la posibilidad de aplicar la prisión preventiva oficiosa. López Obrador expresó su preocupación de que cualquier cambio en esta disposición podría conducir a una mayor impunidad, instando a los ministros de la Corte a reflexionar sobre su decisión. Sin embargo, reconoció la dificultad de modificar esta medida en base a su desempeño reciente.
El presidente citó un caso reciente en el que un delincuente conocido fue liberado en cuestión de horas por un juez, lo que, según él, refleja una sensación de impunidad por parte de ciertos individuos. Este incidente, destacó, subraya la importancia de que los gobernadores estén vigilantes y exijan una actuación responsable por parte de la Corte, ya que son ellos y otros actores del sistema de justicia quienes sufren las consecuencias.
Además, López Obrador abordó el repunte de violencia en Zacatecas, atribuyéndolo a la detención de 26 personas pertenecientes a grupos delictivos. Destacó que la violencia en diversas entidades del país está estrechamente relacionada con el consumo de drogas, señalando a Guanajuato como un ejemplo donde el aumento en el consumo ha exacerbado los enfrentamientos entre bandas delictivas.
El presidente subrayó la importancia de controlar el consumo de drogas y de ofrecer oportunidades educativas y laborales a los jóvenes como medidas para combatir la violencia. En cuanto a la estrategia de seguridad, expresó confianza en que los resultados positivos están comenzando a manifestarse, aunque reconoció que llevará tiempo ver el impacto completo de las acciones implementadas hasta ahora.