Ciudad de México – El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló este viernes al Poder Judicial por otorgar un trato diferenciado al ex procurador Jesús Murillo Karam, concediéndole prisión domiciliaria en el marco del proceso penal por su implicación en la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa. Durante su conferencia matutina, el mandatario manifestó que, a diferencia de la situación de miles de presos sin sentencia en el país, Murillo Karam ha recibido «justicia rápida y expedita».
Interrogado sobre si consideraba que este caso constituía un acto de influyentismo dentro del Poder Judicial, López Obrador afirmó que sí, criticando la rapidez con que se otorgó el beneficio al exfuncionario comparado con la lentitud judicial que enfrentan aquellos sin recursos o conexiones.
El presidente expresó su preocupación no solo por el caso Ayotzinapa sino también por el estado de salud de Murillo Karam, recordando que el ex procurador fue trasladado de urgencia a un hospital en 2022. A pesar de reconocer el derecho a la defensa del implicado, López Obrador remarcó la disparidad en el trato judicial entre Murillo Karam y la mayoría de los reclusos en México.
López Obrador reiteró su llamado a una reforma judicial que permita la elección de jueces, magistrados y ministros por voto popular, argumentando que muchas decisiones judiciales actuales parecen favorecer intereses oligárquicos en detrimento del pueblo. Anunció que su gobierno presentará información la próxima semana sobre intentos del Poder Judicial de declarar inconstitucionales leyes aprobadas por el legislativo que beneficiarían a sectores específicos de la sociedad.
Esta crítica se suma a una serie de expresiones de descontento por parte del presidente hacia el Poder Judicial, al que acusa de actuar en favor de «los grupos de intereses creados» y no en representación de los intereses del pueblo mexicano.