En su tradicional conferencia de prensa, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, abordó varios temas de importancia nacional e internacional. Uno de los puntos destacados fue su respuesta a las acusaciones relacionadas con la Administración de Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos.
López Obrador acusó a la DEA de realizar actividades de espionaje en México, siguiendo la filtración de una investigación que lo señalaba como posible receptor de fondos del crimen organizado para su campaña electoral de 2006.
El presidente calificó estas acciones de espionaje como una «violación fragante». al derecho internacional» y enfatizó que no existen diferencias con Estados Unidos ni con el presidente Joe Biden, destacando que este tipo de situaciones se relaciona más con un sistema político en decadencia.
En la misma conferencia, se discutieron temas relacionados con el bienestar social y la agricultura. La Secretaría del Bienestar, Ariadna Montiel, habló sobre la Reforma Constitucional al artículo 27, que busca asegurar a los campesinos un ingreso seguro y permanente para que cultiven sus tierras y siembren árboles frutales y otras especies. Además, se mencionaron los programas de apoyo a la producción agrícola y pesquera, con inversiones significativas destinadas a beneficiar a millones de productores en el país.
Esta conferencia refleja la postura firme del presidente López Obrador frente a la competencia internacional, al tiempo que destaca las iniciativas de su gobierno para mejorar el bienestar y la producción agrícola en México.