Washington.– La creciente preocupación de la comunidad latina en Estados Unidos por las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) estaría impactando el comportamiento del consumidor, afectando directamente las ventas de grandes marcas como Coca-Cola, Modelo y JD Sports, según reportes empresariales recientes.
Coca-Cola reportó una caída del 3 por ciento en su volumen de ventas en Norteamérica durante el primer trimestre de 2025. Si bien no existe un vínculo estadístico concluyente, ejecutivos de la compañía reconocen que el temor de los consumidores latinos ante los operativos migratorios podría estar influyendo en la baja de consumo.
“El volumen se vio afectado por un debilitamiento de la confianza del consumidor, en especial entre los consumidores hispanos”, declaró James Quincey, director ejecutivo de Coca-Cola, durante una conferencia sobre ganancias el 30 de abril. Señaló también que falsos rumores sobre despidos de empleados latinos y supuestas denuncias ante autoridades migratorias generaron llamados al boicot contra la empresa.
La compañía destacó la relevancia del mercado hispano en Estados Unidos, compuesto por 64 millones de personas con un poder adquisitivo estimado en 2.1 billones de dólares.
Modelo y JD Sports también reportan afectaciones
La marca de cerveza Modelo, propiedad de Constellation Brands, también ha sufrido una ligera disminución en ventas, especialmente entre su público latino. “Hay temor a las redadas del ICE”, afirmó Jim Sabia, presidente de la compañía, durante su participación en el Goldman Sachs Global Staples Forum. “Los consumidores están cambiando su comportamiento: van menos a restaurantes y reducen sus actos sociales”, explicó.
Sabia añadió que la caída se ha reflejado principalmente en las ventas fuera del hogar, es decir, en eventos y reuniones sociales donde tradicionalmente se consume cerveza.
La cadena JD Sports también reportó una fuerte baja en la afluencia a sus tiendas Shoe Palace, cuyo principal segmento de clientes es la comunidad hispana. El director ejecutivo de la firma, Regis Schultz, aseguró que “definitivamente estamos viendo el impacto de la política migratoria en nuestras tiendas”.
Además de la tensión social, factores como las condiciones climáticas extremas y alteraciones en el calendario comercial también fueron mencionados por las empresas como elementos que contribuyeron a la disminución del consumo.
El fenómeno pone en evidencia cómo el contexto político y las medidas migratorias pueden tener efectos inmediatos y tangibles en la economía y en el comportamiento del consumidor, especialmente entre comunidades que históricamente han sido claves para el mercado estadounidense.