Con un millón de especies en peligro de extinción y ante el riesgo de colapso de los ecosistemas, el Día Mundial de la Biodiversidad 2023 busca impulsar la aplicación del Marco para la Biodiversidad. Esto significa proteger y restaurar los ecosistemas, transformar nuestros sistemas alimentarios y redirigir los recursos financieros a proyectos verdes. Para ello, se necesita voluntad política.
Este lunes se celebra el Día Mundial de la Biodiversidad, una jornada de concienciación sobre el papel crucial que desempeña una biodiversidad sana para sustentar la vida en la Tierra, y que tiene lugar tras la histórica adopción del Marco Mundial para la Biodiversidad de Kunming-Montreal, ratificado por 196 países en diciembre de 2022.
Bajo el lema Del acuerdo a la acción: Recuperar la biodiversidad, este 22 de mayo está dedicado a evaluar la crisis medioambiental actual y promover la aplicación del marco, el cual contiene objetivos globales que deben alcanzarse para 2030 centrados en salvaguardar y utilizar de forma sostenible la biodiversidad, protegiendo al mismo tiempo los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades locales.
“Ya se trate del aire que respiramos o de los alimentos que comemos, de la energía que nos impulsa o de las medicinas que nos curan, nuestras vidas dependen por completo de la buena salud de los ecosistemas”, ha declarado el Secretario General de la ONU en un mensaje. “Sin embargo, nuestras acciones están devastando todos los rincones del planeta”, añade.
António Guterres insta además a garantizar pautas sostenibles de producción y consumo, reorientar las subvenciones hacia soluciones ecológicas y reconocer los derechos de los pueblos indígenas. “Y hay que presionar a gobiernos y empresas para que tomen medidas más contundentes y rápidas contra la pérdida de biodiversidad y la crisis climática”.