El legendario ex capitán del Barcelona y la selección mexicana, Rafael Márquez, dejó su cargo como entrenador de la filial del Barcelona para unirse al cuerpo técnico de Javier Aguirre en la selección nacional. En una emotiva carta abierta difundida este martes, Márquez expresó su esperanza de que su salida del club español no sea definitiva. “Como ya sucedió en mi etapa de jugador en el club, espero que no sea un adiós, sino un hasta pronto”, comentó.
Márquez recordó sus dos temporadas al frente del equipo filial del Barcelona, destacando la relación positiva que desarrolló con jugadores, directivos y el personal del club. “Me han ayudado a darme cuenta que hay una pasión y una idea que debo seguir puliendo con base en el trabajo”, escribió, y añadió que espera transmitir “mis conocimientos, valores y mi pasión por el futbol” en su nuevo rol con la selección mexicana.
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“Este nuevo reto lo afronto con la responsabilidad que merece. Es el orgullo por mi país ante un compromiso tan importante como es jugar un Mundial en casa. En mi vida nunca me ha gustado estar en una zona de confort. Una de las cosas más importantes en mi filosofía es que, para conseguir objetivos, el trabajo duro es la piedra angular, por lo que daré todo lo mejor de mí para poder ayudar a mejorar cada área en la que me toque trabajar”, concluyó Márquez, mostrando su determinación y compromiso hacia el proyecto del Tricolor.
