En la edición para 2022 de la Guía Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, la OMS especificó que más de 200 enfermedades son causadas por ingerir alimentos contaminados con bacterias, virus, parásitos o sustancias químicas como los metales pesados.
La carga que esto tiene en los sistemas de salud pública es comparable a la de la malaria o el VIH-SIDA. Sin embargo, las enfermedades provocadas por los víveres no inocuos se pueden prevenir con educación, higiene y la manipulación adecuada de los alimentos.
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El documento explica que los microbios resistentes a los antimicrobianos se pueden transmitir a través de la cadena alimentaria, por contacto directo entre animales y personas o a través del medio ambiente, y detalla que unas 700 000 personas mueren cada año en el mundo debido a infecciones resistentes a los antimicrobianos.
Además, subraya que las enfermedades causadas por parásitos transmitidos por los alimentos pueden provocar problemas de salud agudos y crónicos, y refiere que los casos de las once principales enfermedades parasitarias llegan a 48,4 millones al año, y que un 48 % de ellos es de origen alimentario.